domingo, octubre 11

Palabra Discipular Año IV Semana 189



Mateo 15, 21-39. El tema de la contaminación es uno de los grandes temas actuales de la humanidad que incluso ha desplazado a un segundo término el de las probabilidades de una guerra nuclear, y es que ya nadie duda de que el daño ambiental es irreversible, en especial el relacionado con el calentamiento global del cual ya hay decenas de manifestaciones en todo el globo terráqueo, y por lo mismo en todas las naciones se están haciendo esfuerzos ingentes por a lo menos amenguar un ya visible efecto invernadero, y el uso de las energías limpias cada vez se pondrán más en uso. Sin embargo, a este necesario esfuerzo multinacional, y del cual los cristianos tenemos que sumarnos con mucha razón en especial sabiendo en conciencia que como hijos de Dios tenemos igual la mayordomía de la tierra, a este esfuerzo mundial le falta tratar de solucionar uno que es la raíz misma de todos los males incluido el ambiental, es el mal mismo, madre de todos los males de la humanidad, y de la cual no solo no le prestamos atención sino incluso para peor esta “contaminación” es cada vez más densa y por lo mismo sus resultados serán cada vez más severos, y es la que Jesús, ya hace dos mil años trató en el texto que estudiamos la semana pasada, que es la contaminación, no la que entra al hombre, sino la que sale de su corazón, pues ella es la que realmente enciende la rueda de la misma creación, destruyendo todo a su paso, comenzando en la misma mente del ser humano, y mientras no se ataque a la raíz, poco se avanza cuando la solución es sólo en las ramas o frutos, resultantes más bien del real problema de la humanidad. Hace pocas horas se ha entregado el premio Nobel de la Paz al presidente de los EEUU de NA , Barak Obama, en razón de sus esfuerzos de desnuclearización del mundo y recomposición de los temas de paz y acuerdos internacionales, y creo que muy bien dado por la academia de Estocolmo, pero no existe ningún interés en este mundo, en forma oficial, por los Estados y en general por los hombres, excepto casos aislados, de motivar hacia la descontaminación de lo peor que ataca a esta pobre humanidad, que se encuentra en el corazón mismo de los hombres y que desde ese centro todo lo que la daña nace y se esparce. El aborto (solo en Perú, noticia reciente, se producen al año 330.000 abortos clandestinos y que decir que muchas naciones lo tienen legalizado y financiado por todos), el divorcio, la aprobación y legalización de las uniones homosexuales, el amasar por unos pocos riquezas inmensas (hoy aparece un informe de que hay hombres que tiene tanta fortuna que son capaces de comprar una país entero), la explotación por los fuertes, la drogadicción, la prostitución, la pornografía aprobada casi en todas las naciones, y tantas otras manifestaciones nacidas de la perversión de los hombres, hace realmente que esta tierra esté contaminada con sangre, muerte, inmoralidad, abusos, explotaciones, etc. Y de eso pocos hablan, no hay un galardón para los que se oponen al pecado, y por ello, una de las causas, el Maestro de Nazareth fue llevado al Gólgota. Ya se avecina de nuevo en el hemisferio norte la H 1N1  y todo el mundo se prepara para vacunar masivamente a su población. Nuestro país, Chile, ya compró más de tres millones de dosis, y me parece bien que nuestros gobiernos se preocupen  de ello, pero hay una peste mortal que se expande y es la que nace de los corazones de los hombres y que contamina toda la sociedad y de la cual pocos reconocemos y asumimos tal enfermedad funesta y por los mismo pocos buscan la medicina eficaz para su sanidad, prefieren seguir discutiendo sobre el medio ambiente, pero nada sobre su propio mal que aporta a engrosar la nube de pecado que se cierne sobre el mundo. Jesús no vino a ajustarse a las tradiciones y a lo aceptado por la sociedad de entonces, él vino “al hueso” del problema del hombre, él vino a dar una solución de raíz, y esta parte no de una decisión política, ni social, ni comunitaria, el punto de partida es individuo a  individuo, parte de un tratamiento personal y desde allí que pueda extenderse a la comunidad entera. Sin hombres nuevos no hay nueva sociedad. Muchos piden cambios pero ellos mismos no están dispuestos a cambiar en sus propias vidas. Los cambios sociales comienzan con nuevos entes sociales. Y el hombre nuevo comienza con un corazón nuevo que es la obra de Cristo y el Espíritu Santo y su Palabra. Sin ello, todo solo es retórica.
1. Una salvación Sin Fronteras (15, 21-31) Esta historia tan especial se inserta en uno de los objetivos del escritor Mateo, quien dirige su evangelio a la cristiandad proveniente del judaísmo quienes aún tenían fuerte resabios de rechazo a la evangelización de los paganos o gentiles (gr. Etnias), léase no judíos, a menos que junto con hacerse cristianos tuvieran que pasar por el legalista y esclavizante ritual judaico, incluido en especial la circuncisión, e igual Mateo escribe a estos mismos no judíos conversos a Cristo, para que no se dejasen avasallar por este proselitismo doble de los judeos-cristianos, sino que pudiesen conservar su libertad a la que fueron llamados y por medio de este escrito Mateo quiere instruirles una y otra vez en todo su evangelio de que manera el fundador del Reino de los Cielos, el mismo Hijo de Dios e Hijo de David, muestra desde su nacimiento y antes, y en su ministerio que los no judíos tienen plena entrada a recibir los beneficios de este evangelio. Así tenemos, como por ejemplo, la misma genealogía de Jesús, incluye varias mujeres paganas como antepasadas del Señor, luego en su infancia, la adoración que le rinden los sabios de Oriente, la huída de la sagrada familia hacia Egipto, la fe del centurión romano alabada por Jesús, fe que ni en Israel se hallaba,  y agregar a ello la infinidad de pasajes en que Jesús increpa a la religión oficial del pueblo de Dios por estar sobrecargada de tradiciones que se sobreponen a la misma Palabra de Dios. Ahora, la sanidad de la hija de esta mujer de la tierra, una cananea, que demuestra tener más fe, a través del áspero diálogo que confronta con Jesús, que es capaz incluso que el mismo plan inicial del Maestro, venir a su pueblo es el proyecto inicial, sin quedarse en esa etapa para pasar luego a la otra que es la evangelización del mundo, y hace que el mismo Señor se salga de su libreto para hacer una muestra de su plan final y decisivo. No debe molestarnos el poder concluir en este párrafo que el protagonismo aquí no es de Jesús sino de la mujer que no ceja hasta lograr su objetivo, es la fe de ella que hace de que efectivamente en Cristo hay respuesta. Creo que uno de los grandes temas de la vida cristiana radica no solo en un Dios grande y todopoderoso, lo cual es indiscutible a excepción de los agnósticos y ateos y cristianos nominales (no conversos, cristianos por cultura, no por encuentro personal) sino en personas con una fe que mueva las montañas, que mueva el corazón de Dios, que pueda “cambiar” a Dios, como fue el caso de tantas veces en que aparece en la Biblia de que “Dios se arrepintió”, denotando con ello que muchas decisiones divinas quedan a la posibilidad de ser trocadas por causa de hombres que saben tocar su corazón. Al rey Ezequías se le anunció por un profeta de Dios su muerte inminente e inmediata, pero él clamó a Dios y Dios cambió su decisión dándole 15 años más de vida (2Reyes 20). Dios decidió raer en varias ocasiones a todo el pueblo rebelde de Israel y comenzar la historia de nuevo solo con Moisés, pero éste clamo y reclamó a Dios y por esa oración de fe Dios no lo hizo. ¿Dios puede cambiar entonces sus decisiones? Si. Y esto no tiene que escandalizarnos, es propio de lo de un padre ante sus hijos, hechos a su imagen y semejanza. Dios no pierde soberanía por esto, al contrario la gana. Muchos endulzan estos episodios con mil explicaciones, no pueden ver que Dios pueda “arrepentirse”, y lo que pasa es que tienen una concepción de un dios según la filosofía de Platón quien dios era para él el motor inmóvil, pero la teología bíblica es absolutamente contraria a la filosofía griega, Dios es el Padre móvil, no es un motor, no es un ser inmóvil, creo que es tiempo de deshacernos de los conceptos teológicos de Dios que siguen en el inconciente de la cristiandad por dos mil años ya y empezar a conocer a Papá ( y hasta decir esto ofende a mucho) y dejar de confundir reverencia como una manera de quitar relación paternal y hacer una relación formalista, fría, distante, cuando Dios como se revela en su Palabra es todo lo contrario, y este episodio donde pareciera que el legalismo judío que por un momento representa Jesús así como el proyecto original tan estructurado, sin embargo es trocado sin miramiento a favor del corazón de una mujer que intuye que la perseverancia es un factor que puede mover el corazón mismo de Dios. En contraste con este diálogo está el texto siguiente en que se muestra al Maestro haciendo milagros a destajo pues ahora está en su tierra. Para nada esto demuestra favoritismo, sino que reencamina su plan original de venir a las ovejas perdidas de Israel, así como concentra sus enseñanzas en grupos reducidos de apóstoles. Jesús sabe que su ministerio es corto, no hay tiempo para ocupar sino en concentrarse en la su misión en el espacio y tiempo que tiene, ya en su momento dejará claro que el punto de partida de la misión universal les va a corresponder a la naciente iglesia en donde Él mismo se va a multiplicar.
2.La alimentación del mundo no judío (15, 32-39). Les puede parecer sorprendente el título de este trozo que para muchos teólogos es nada más que una repetición del relato similar anterior, la de los cinco mil, ahora cuatro mil, y para ellos, es solamente un relato del mismo hecho proveniente de una tradición paralela y que el escritor Mateo no quiso dejar fuera. Tal explicación es muy simplista indudable. Lo mismo lo es la posición fundamentalista que es contraria, de que efectivamente este es un relato de un milagro distinto al anterior, que se suma al anterior y lo exponen literalmente sin tener una mirada sana y crítica. Pero ni uno ni otro dan con el verdadero sentido del texto, el cual tiene de parte del autor Mateo un objetivo primario dado en las mismas palabras del texto, que este es un milagro ahora en términos no judío, como fue el anterior, era el milagro de la multiplicación y de llenar la necesidad del hambre o de eliminar el peligro de la muerte, o suplir la vida a los hambrientos a los judíos, ahora, el enfoque en base a la numeración es que este milagro se da en la frontera de la gentilidad, siendo una propuesta, como ya explicamos en la sanidad de la cananea, de que ahora también la alimentación milagrosa, luego la vida eterna, el reino de los cielos, está y estará hacia el mundo gentil. El siete es el número propio de lo completo de los gentiles, de allí que Juan lo usa tanto en su texto de Apocalipsis, mientras el doce era del pueblo judaico. El cuatro, signo de pueblo en general, en donde tienen cabida judíos y gentiles. Por tanto no es simplemente una versión distinta del mismo milagro. Mateo no es tontito, es un pensador de primera línea, y el Espíritu inspirador que decir.
II. Misión Para la Vida (desde el 11 de Octubre de 2009 hasta romper con todos los prejuicios que hemos mal heredados y entender el evangelio como el mejor panegírico de libertad y salud. p.Manuel SHC)

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